Si escuchamos ronquidos, apnea o registramos intermitencia en el dormir de los más pequeños, es importante consultar a un especialista, pues el niño podría padecer un trastorno del sueño infantil. De hecho, 30% de los menores de 2 años tienen problemas para conciliar el sueño y, en el caso de los adolescentes, de 10 – 15% registran algún trastorno relacionado, explica el Dr. Pablo Brockmann, pediatra y especialista en sueño de la Red de Salud UC CHRISTUS.

Entre los problemas más comunes que pueden padecer los menores de 18 años se encuentran: ronquidos, insomnio, parasomnia -episodios breves de despertar en medio del sueño-, síndromes de piernas inquietas -la necesidad compulsiva de mover las piernas que puede afectar el sueño-, entre otros.

Los síntomas relacionados a un mal dormir se pueden extender a la vida diaria: afectando el desempeño escolar y el carácter del niño o adolescente. Para alcanzar un correcto diagnóstico, tras ser evaluados por especialistas del sueño, se puede acudir a métodos como el de la actigrafía.

¿Qué es la actigrafía?

Es un examen no invasivo que mide la duración y calidad del sueño, en este caso, de pacientes pediátricos que van desde el nacimiento hasta los 18 años. Con una especie de reloj que se utiliza en la muñeca durante 7 días, los especialistas pueden analizar la posible presencia de un problema al registrar el ritmo ciclo de sueño-vigilia: cantidad de horas que duerme la persona, etapas de sueño, si existen interrupciones, temperatura corporal, entre otros parámetros.

¿Cuáles son las opciones de tratamiento?

El Centro del Sueño UC cuenta con un equipo interdisciplinario que provee múltiples opciones para los problemas relacionados al sueño: desde pediatras, otorrinolaringólogos, neurólogos, psicólogos, odontólogos, hasta un coach del sueño que busca implementar técnicas para el buen dormir y corregir malos hábitos que puedan estar causando estos trastornos.

Más información en suenopediatrico@med.puc.cl