Hay diversas formas de hacer de esta festividad un momento más saludable en familia. El consumo de huevos no macizos, por ejemplo, será más beneficioso ya que aportan menos calorías en comparación con los que sí lo son. Incluso, Pascua de Resurrección puede ser una buena instancia para echar a volar la imaginación: pintar las cáscaras de huevos duros para luego esconderlos, o cocerlos y hacer formas de conejo para incentivar su consumo en los niños son algunas alternativas que evaden la alta ingesta calórica de los chocolates.

¿Sabías que, en Chile, el índice de sobrepeso y obesidad en niños es de casi 45%? Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), esta cifra es considerablemente alta si se compara con el 25% que se promedia en el resto de los países. Por eso, considera los huevitos de chocolate con menos sellos, o derechamente, opta por las opciones creativas sin necesidad de comprar grasas y azúcares.