Los más pequeños de casa regresan al colegio en un segundo año de pandemia, por lo que se hace necesario relevar los cuidados que ellos deben tener al interior del establecimiento, asimismo al salir de casa y al llegar a ella. ¿Cuáles son los cuidados que deben tener niños y adolescentes? 

Consejos dedicados a los padres para el regreso a clases presenciales de sus hijos: 

• Para ir al colegio con tranquilidad, realizar previamente un chequeo de temperatura.
• Explicarles la importancia del lavado frecuente de manos e higienización con alcohol gel.
• Que usen una mascarilla adecuada: cómoda y que se ajuste al tamaño de su cara, además de llevar mascarillas de repuesto.
• Que mantengan el distanciamiento físico.
• Si tiene tos intensa, malestar general o dolor muscular, es mejor que no asista a clases.

“En el colegio, se debe mantener la mascarilla de forma constante y solo sacarse para alimentarse con una colación, beber algún líquido o realizar una actividad física importante e intensa. No olvidar que esto se debe hacer también en recreos”, aclara la Dra. Cecilia Perret, infectóloga pediatra.

Se debe evaluar en la familia si alguno tiene síntomas relacionado al coronavirus o si tuvieron contacto estrecho con alguien contagiado. De ser así, se recomienda no asistir presencialmente a la casa de estudio.

Otras medidas de prevención para el retorno a clases presenciales:

• Idealmente que niños vayan seguros y no estén expuestos al virus a través del transporte público. Buscar alternativas.
• Preparar colación sellada e individual.
• Evitar juegos de contacto.

Para que el retorno a las clases no se vuelva un tormento, es importante que los padres transmitan a los niños este nuevo inicio como algo positivo y natural.

Consejos para el retorno escolar seguro:

• Plantear el regreso a clases como algo positivo e importante.
• Conversar con los niños sobre la importancia del regreso al colegio, sobre cuáles son las expectativas para este año.
• Hay que escuchar sus temores, dudas, intereses y expectativas con mucha atención y orientarlas respetuosamente.
• Establecer y respetar los horarios para levantarse, dormir, alimentarse, hacer tareas y jugar.
• Supervisar su desayuno, que es el principal alimento que les permitirá concentrarse y aprender bien durante toda la mañana.