La enfermedad celiaca es una enteropatía inmunomediada crónica con un componente genético, provocada por la ingesta de gluten encontrada en el trigo, cebada y centeno. Ésta, se puede presentar a través de síntomas digestivos, tales como:

Enfermedad celíaca clásica:

• Diarrea.
• Distensión abdominal.
• Pérdida de peso.
• El daño al intestino delgado dificulta la absorción de ciertos nutrientes. Esta malabsorción puede causar problemas como anemia o baja densidad ósea, incluso cuando no hay síntomas digestivos.

Enfermedad no clásica:

• Enfermedades neuropsiquiátricas y autoinmunes,
• Deficiencias nutricionales.
• Infertilidad.
• Tumores digestivos.

Diagnóstico

Se realiza mediante anticuerpos serológicos y evidencia de atrofia vellositaria en biopsia duodenal. “La mayoría de los pacientes con esta enfermedad no son diagnosticados, reciben un diagnóstico erróneo o experimentan un retraso en el diagnóstico. Hacer su diagnóstico oportuno es importante porque las personas que no reciben tratamiento pueden desarrollar complicaciones”, explica el Dr. Alberto Espino, gastroenterólogo UC CHRISTUS.

La Enfermedad Celíaca afectaría aproximadamente al 1% de la población mundial y chilena, con un predominio femenino de 3:1. Sin embargo, esta cifra puede ser mayor debido al subdiagnóstico que hay de esta enfermedad.

Tratamiento

El único tratamiento efectivo es la dieta libre de gluten (DLG) de manera estricta y mantenida de por vida, la cual reduce los síntomas, permite la cicatrización de la mucosa intestinal y previene las complicaciones a largo plazo, sin embargo, no es fácil adoptar debido a la omnipresencia del gluten en los alimentos de consumo general.

“Si la DLG no es bien realizada impacta sobre la calidad de vida. Los reportes de adherencia a DLG varían según las herramientas utilizadas para su medición, por ello esta variación va desde un 42% a un 91%. Las causas de adherencia a una DLG son multifactoriales. La falta de adherencia inadvertida es más frecuente que la falta de adherencia intencional”.

Algo relevante en relación con esta enfermedad es la contaminación cruzada con gluten de productos sin gluten. Ésta, es una de las principales causas de incumplimiento involuntario, mientras que la disponibilidad limitada, los altos costos de los alimentos sin gluten, son responsables de romper intencionalmente una DLG.  “Dentro de los factores que inciden en el cumplimiento a una DLG están: la adherencia inicial del paciente, factores socioeconómicos, influencias cognitivas y emocionales, conocimiento de alimentos libres de gluten, membresía a grupos/fundaciones de pacientes, consultas regulares de seguimiento nutricional y síntomas clásicos (digestivos/malabsorción) en el momento del diagnóstico.

En Chile, según datos publicados en dos estudios en personas registradas en la Fundación CONVIVIR, las tasas de adherencia a la DLG (48%-57%) y calidad de vida (44%-49%) son bajas. Los factores predictores de mejor adherencia a la DLG y CV resultaron el género masculino y tener mayor edad. Un estudio chileno durante la pandemia COVID-19 demuestra que se ha agudizado el problema, siendo el costo de los alimentos el factor más asociado con adherencia regular y mala a la DLG y baja calidad de vida. Lo que se vuelve más crítico en períodos económicos inflacionarios, como el que actualmente vive Chile.

“La exclusión total del gluten es difícil de lograr en la práctica y las transgresiones voluntarias e involuntarias son muy frecuentes, por lo que es muy importante disponer de métodos y estrategias de monitorización objetivas y precisas de adherencia a DLG para mejorar y lograr mantener a largo plazo su cumplimiento”, finaliza el Dr. Espino.