Junto con la llegada de fin de año, también arriba la estación del año donde reina el calor; el verano. En esta oportunidad, los especialistas pronostican grandes e inauditas olas de calor para el país debido a los factores relacionados con el cambio climático.

Es por esto que, la preocupación en tema de salud tiene que ser aún mayor, sobre todo para la población más longeva, quienes sueles ser los más afectados con climas extremos.

Los expertos en la materia indican que la población más adulta tiene piel más delgada y menor aislamiento térmico, por lo que están más expuestos a sufrir los estragos de los días de calor extremo.

El Dr. Juan Carlos Rodríguez, médico internista y geriatra de UC CHRISTUS, sostiene que el proceso de envejecimiento lleva consigo una disminución de las reservas de agua en el cuerpo, volviendo a las personas mayores más propensas a la deshidratación.

“A medida que envejecemos, perdemos la sensación de sed, lo que puede resultar en una ingesta insuficiente de líquidos y predisponer a complicaciones como desequilibrios electrolíticos y alteración de la función renal”, explica el doctor Rodríguez.

Recomendaciones alimentarias

El médico indica que la alimentación juega un rol muy importante en el combate del organismo con las altas temperaturas del verano. Es necesario consumir al menos 2 o 3 litros de líquido, el cual puede ser en forma de agua o en otras bebidas como el té e infusiones.

 Debido a que los adultos mayores pierden la sensación de sed, el especialista recomienda utilizar distintas estrategias, como saborizar el agua con hierbas o con frutas. “Mantener el agua fresca y refrigerada también puede aumentar su atractivo. Para aquellos que tienen problemas de micción nocturna, se sugiere concentrar la ingesta de agua principalmente durante el día y no beber en exceso antes de dormir, para si evitar insomnio”, comenta.

Además, en cuanto a las comidas, los expertos afirman que es crucial asegurar que nuestro plato tenga proteínas, al menos de 20 a 30 gramos cada una.

Consejos para combatir las olas de calor

Las complicaciones para los adultos mayores debido al calor en verano pueden llegar a provocar una gama de consecuencias, desde problemas gástricos hasta en la epidermis.

En UC CHRISTUS te entregamos una lista de consejos para prevenir y enfrentar el calor:

• Protección Solar: debido a que la piel en la población mayor, la recomendación es no exponerse al sol entre las 11:00 y 17:00 horas. En otros horarios, ocupar elementos como protector solar, gorro o sombrero y anteojos de sol.
• Alimentación e hidratación: 2 a 3 litros de líquido al día. Sumar a la dieta frutas, verduras y proteínas.
• Buen dormir: importante mantener fresco el lugar de descanso nocturno. También se recomienda tomar duchas antes de dormir.
• Ropa adecuada: ligera, transpirable y clara. Preferentemente, la ropa que sea de algodón. En su preferencia, debe ser suelta, para mayor comodidad y para disminuir la sensación de calor.
• Duchas cortas: es relevante hidratar la piel con productos hipoalergénicos. A diferencia de lo que se piensa, las duchas deben ser cortas, con agua tibia y solo higienizar axilas, genitales, manos y pies.