Aunque tradicionalmente se ha considerado una enfermedad de la adultez, la hipertensión está afectando cada vez más a personas jóvenes. Así lo confirma el Dr. Jorge Jalil, presidente de la Sociedad Chilena de Cardiología y cardiólogo de UC CHRISTUS, quien advierte que cada vez se diagnostican más casos de hipertensión arterial en menores de 30 años en nuestro país.

Este fenómeno, que también se observa en países como México, Estados Unidos y Reino Unido, se relaciona directamente con estilos de vida poco saludables: consumo excesivo de alimentos ultraprocesados, el consumo excesivo de sal, sedentarismo, tabaquismo y estrés. “Estamos viendo más casos de hipertensos jóvenes que antes. La combinación entre obesidad y predisposición genética es un factor determinante”, señala el Dr. Jalil.

La hipertensión es una enfermedad silenciosa, es decir, puede no presentar síntomas evidentes durante años, mientras genera daño progresivo en órganos vitales como el corazón, riñones, ojos y arterias. Por eso, el diagnóstico y tratamiento precoz son claves para evitar complicaciones como infartos o accidentes cerebrovasculares en la adultez.

Desde UC CHRISTUS hacen un llamado a la prevención. “Es fundamental que los jóvenes con factores de riesgo como antecedentes familiares, sobrepeso u obesidad comiencen con controles médicos a partir de los 15 años”, enfatiza el especialista de UC CHRISTUS.

La buena noticia es que la hipertensión es una condición prevenible y tratable. Cambios en la alimentación, actividad física regular y control del estrés son parte del camino hacia una vida más saludable. En UC CHRISTUS, el compromiso es seguir aportando desde la medicina preventiva, la educación y la investigación, para enfrentar este desafío creciente entre los jóvenes.