La ictericia se caracteriza por la coloración amarillenta de la piel y las mucosas causada por un depósito anormal de bilirrubina en estos tejidos. Este signo es más evidente en la mucosa oral y en la zona blanca de los ojos.
La aparición de la ictericia puede producirse por tres mecanismos:
La ictericia también puede aparecer en el recién nacido y se denomina ictericia fisiológica porque es producto de un hígado al que le falta madurar. Puede aparecer en las primeras horas después de nacimiento o, en casos patológicos, días o semanas después del parto.