La Cosmetóloga es una experta de la salud a quien le compete hacer profilaxis y no diagnóstico de enfermedad. Como está íntimamente ligada a la dermatología, debe tener conocimientos de anatomía, fisiología y dermatología para derivar oportunamente cuando se presente algún problema que no sea del orden estético, sino de competencia médica.
El Cosmetólogo puede realizar limpieza facial, masajes, depilación, drenaje linfático manual y, en general, todos aquellos procedimientos faciales o corporales que no requieran de la formulación de medicamentos (como higiene, abrasión, extracción de comedones abiertos y cerrados, drenaje de pústulas, etc.), intervención quirúrgica, tratamientos invasivos o actos reservados a profesionales médicos.