El trasplante pulmonar consiste en el reemplazo de uno o dos pulmones enfermos por un órgano sano, proveniente de un donante cuyos familiares han aceptado generosamente la donación de un órgano. Este tratamiento le permitirá reintegrarse a su vida familiar, laboral y social.
La mayoría de los pacientes con enfermedades pulmonares crónicas pueden mejorar su estado de salud, con un tratamiento médico adecuado. En otros casos, su enfermedad pulmonar empeora pese a un tratamiento médico adecuado y la única opción de tratamiento es el trasplante. Estos son casos en los que la capacidad funcional está muy disminuida y se han ocupado todas las demás opciones de tratamiento.
Cualquier enfermedad crónica sin un tratamiento adecuado puede progresar hasta que sea necesario el trasplante. Las más frecuentes son:
Debemos recordar que la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica se debe generalmente al tabaquismo, por lo que es una enfermedad prevenible y evitable.
Dependerá de factores clínicos como el tipo de enfermedad pulmonar y de su edad si se trasplanta uno o dos pulmones.
Sólo unos pocos pacientes son seleccionados para trasplante pulmonar.