Los indicadores de volumen nos permiten medir la actividad que desarrollamos como prestador de atenciones de salud y nos entregan una idea de la complejidad y nivel de expertos de nuestra red en los distintos escenarios clínicos donde nos desenvolvemos.
Este indicador se refiere al egreso de los pacientes que han ocupado una cama hospitalaria. El egreso puede darse por alta médica, traslado a otro establecimiento asistencial o fallecimiento.