Mitos y realidades sobre la diabetes: educación y prevención
Afecta a personas de todas las edades y condiciones físicas. Combatir los mitos es clave para un manejo adecuado.
El 14 de noviembre se conmemora el Día Mundial de la Diabetes, una fecha que nos invita a reflexionar sobre una enfermedad que afecta a millones de personas en todo el mundo. A pesar de su relevancia, persisten ideas equivocadas sobre quiénes pueden desarrollarla, cómo debe ser la alimentación de una persona con diabetes, y qué tan grave puede ser esta condición.
Hoy, como UC CHRISTUS, queremos abordar algunos de estos mitos y proporcionar información confiable para ayudar a comprender mejor la diabetes y la importancia de su manejo adecuado.
Mito 1: La diabetes solo afecta a personas con sobrepeso.
Realidad: En relación con diabetes tipo 2, puede afectar a personas de cualquier peso. Existen factores genéticos, antecedentes familiares y ciertos hábitos de vida que también influyen en su aparición. Para la diabetes tipo 1, en particular, es una condición autoinmune que no tiene relación con el peso.
Mito 2: Las personas con diabetes no pueden comer azúcar.
Realidad: Las personas con diabetes pueden consumir azúcar, pero deben hacerlo de manera controlada y en el contexto de una dieta balanceada. Lo importante es monitorear los niveles de glucosa en la sangre y trabajar con un profesional de salud para ajustar la alimentación y las dosis de insulina o medicamentos según sea necesario. La clave es el equilibrio.
Mito 3: La diabetes tipo 2 es menos grave que la diabetes tipo 1.
Realidad: Ambas formas de diabetes requieren un manejo riguroso y pueden generar complicaciones graves si no se controlan adecuadamente. La diabetes tipo 2, aunque a menudo puede controlarse con dieta y ejercicio, también puede requerir medicación y puede causar daños significativos a la salud si no se atiende de forma adecuada.
Mito 4: Solo los adultos mayores tienen diabetes.
Realidad: Aunque es cierto que el riesgo de diabetes tipo 2 aumenta con la edad, cada vez más jóvenes y niños desarrollan esta condición, especialmente debido a factores como el sedentarismo y la alimentación poco saludable. La diabetes tipo 1, por otro lado, suele diagnosticarse en la infancia o adolescencia, aunque puede surgir a cualquier edad.
Mito 5: La actividad física es peligrosa para las personas con diabetes.
Realidad: Al contrario, el ejercicio es fundamental para el control de la diabetes, ya que ayuda a regular los niveles de glucosa en sangre, mejorar la sensibilidad a la insulina y mantener un peso saludable. Es importante que cada persona con diabetes consulte con su médico para adaptar un plan de actividad física adecuado a sus necesidades y capacidades.
Mito 6: Si ya tengo diabetes, no puedo hacer nada para mejorar mi salud.
Realidad: Con un buen control y seguimiento médico, las personas con diabetes pueden vivir una vida plena y activa. La educación es esencial para aprender a manejar la condición y reducir el riesgo de complicaciones a largo plazo. Esto incluye hábitos saludables, monitoreo regular, y el apoyo de profesionales de salud.
Desde UC CHRISTUS, animamos a la comunidad a conocer, evitar y comprender la diabetes. Con una formación apropiada y el apoyo de un equipo médico, se puede llevar una vida de calidad y prevenir problemas relacionados con esta enfermedad. La diabetes representa un reto, pero también representa una ocasión para proteger nuestra salud y realizar transformaciones positivas.